Sexualidad, sobre que lo que me gustaría haber escuchado y contado a mi progenie.

Empezaría diciendo que es la forma que tienen los cuerpos de relacionarse con un@ mism@ y con el entorno. Por muy marrano y obsceno que suene en una sociedad enferma, si nos relacionamos con el resto del mundo a través de nuestros cuerpos y no necesariamente por el coito o penetración.

Recuerdo esos años convulsos de la adolescencia la edad del pavo, la tontería.. el caso es que es supremamente importante porque te vas a acordar toda la vida, que tu familia lo asuma con naturalidad y te sientas medianamente libre para poder hablar de eso si el cuerpo te lo pide. Es una verdad irrefutable que en esa edad los papas y familia son vistos como meros vejestorios que no nos entienden en absoluto, y en cierta medida es verdad. Afrontar este reto como familia sea como sea el modelo familiar es una aventura de la que todos podemos beneficiarnos. Quizás hasta nos sirva para plantearnos nuestro modelo sexual, para sanarnos entre todos sin tener que caer en la vergüenza, cada uno en su intimidad con la llegada de esta época de un familiar puede asumir sus carencias y miedos sin ningún temor, siempre hay tiempo para reconciliarse con uno mismo.

No me han gustado las miles de guías que he ojeado, parece mentira que tantos años que estuve en contacto con este material y es ahora que lo tengo cerca cuando me doy cuenta que no me gusta ninguno. Tuve mucha suerte con mi madre, una madre impresionante que pudo acercarse a mi a hablarme de estas cosas con franqueza y naturalidad desde que era muy pequeña, además en su entorno laboral había unas guías que a mi me gustaban porque tenían dibujitos anatómicos y cuando supe leer me parecían literatura buena. Desde que somos muy pequeños desarrollamos nuestra sexualidad, y sin ninguna malicia, que además no hay malicia en tener sexualidad, más bien hay normalidad. Nos tocamos donde sentimos placer, igual que estornudar nos da gustico o rascarnos cuando nos pica la piel, considero importante no castigar estos comportamientos en los bebes, ni tampoco darles una importancia exacerbada, dejar que ocurra y fluya ese desarrollo sano que necesita el pequeñ@. De esto seguro que ya hay muchos pedagogos guays y progres que hablan de esto. Lo escribo para aconsejarme a mi misma y aceptar esa parte tan natural y necesaria del desarrollo. En esa época también llegará la famosa pregunta ¿de donde vienen los bebes?. También hay material didáctico de sobra para ojear junto con el peque y por supuesto la cercanía de su familia para explicarle tranquilamente que vienen de una relación sexual de un hombre y mujer que se relacionan con los cuerpos, explicarles algo de anatomía sencilla vulva, pene… y así no habrá que inventarse nada. Es mucho más sencillo así. Aunque yo no lo recuerdo mi madre si me facilitó este material y me lo contó y parece que yo seguí un desarrollo “normal” sin que fuera de vital importancia esa información me ubicó en la realidad sin mayor trauma porque ni me acuerdo.

Digamos que en las casa llega el pánico sobre todo cuando somos niñas y nos viene el período o la regla. De esto hay mucho que decir porque son dos eventos en nuestras vidas que como mujeres nos afectan de forma diferente. A mi me gustó en general como me explicó mi madre el tema de la regla, fue a los 30 cuando me plantee otras cosas, hasta entonces era algo negativo que me daba dolor me hinchaba y me indisponía para la vida cotidiana. A esta edad es cuando me vino por mano de una amiga hermana la inspiración de empezar a verla de otra forma, de reconciliarme con ella admirarme por el hecho de tenerla y respetarla. Por eso ahora si lo contaría de otra forma, haría una fiesta y empezaría a conectarme con mi cuerpo desde los 12 años. Pocas mujeres estamos en esa onda, seguimos en general viendo la regla como un tedio, un fastidio, un castigo divino que para la que lo desee puede traer la alegría de engendrar, al resto creo que le gustaría hasta quitársela. Nos meten hormonas para modificarla, para no embarazarnos para controlarnos pero soy una firme activista a pesar de haberlas tomado, de mis hormonas naturales y de que la planificación es de todos no solo de nosotras.

Cuando me explicaron la regla en casa me parece ahora muy técnico, en cuanto a la explicación fisiológica, pero nadie te advierte de que tu cuerpo y disposición en el mundo van a cambiar a partir de ese momento. Tus emociones se vuelven cíclicas, tus periodos de actividad y de menor energía se suceden, tu cuerpo cambia y no solo en esa edad sino que cada mes cambia. Es importante saberlo, porque si una siente la comprensión de las mujeres cercanas se siente aliviada, no hay que aconsejar tan efusivamente de cómo taparla sino al contrario de cómo aceptarla y empezar a socializarla sin ninguna vergüenza. Todavía hoy encuentro que mi entorno se escandaliza o asusta si simplemente dices que tienes la regla. Socialmente nos queda mucho para empatizar con la naturaleza, es como si alguien dice en invierno los días son más cortos y nos sintiéramos avergonzados, algo muy absurdo. Esa vergüenza de la que carga con un pecado en lugar de con una bendición terrenal es la que cargamos desde que somos niñas-adolescentes. Desde el colegio, en que nos ponemos nerviosas para que no se note, nadie lo sepa, ningún chico ni se lo imagine y eso trae muchas cargas negativas que obviamente se relacionan con nuestra sexualidad. Ya empezamos a desarrollarnos ocultando, tapando y con mucha vergüenza.

No se cuando fue el momento de la carga negativa, pero sigue presente. Podríamos apostar por ver un hecho biológico como algo grandioso, que pudiéramos trabajarlo en los colegios y casas para que toda la familia cambiara ese concepto tan negativo. En ese momento que nuestras caderas se ensanchan, nos cambia la cara, la nariz, nos salen granitos, nos crecen los pechos se nos hinchan, sentimos como si nos metieran aire a presión…. Es un cambio muy importante que si se verbalizara ganaríamos todos, decirle al mundo ya soy otra, y no me da vergüenza estoy orgullosa de que mi vida cambie, de tener ese privilegio.

Con estos cambios una se pregunta porqué tan rápido, si ayer era una niña y ahora no sé ni lo que soy. Porque estos cambios no son así en un dia, van poquito a poco. Y anímicamente eso nos distorsiona la vida, yo recuerdo esos años como unas subidas y bajadas de vértigo, me costaba comprender que estaba pasando. Porque ahora me salían pelos y sentía algo diferente hacia otras personas, en mi caso hacia los “chicos” que antes te gustaban y punto pero después sentí que es que además algo me revolvía dentro. Primero deberían enseñarnos a relacionarnos con nuestros cuerpos, explorarlos conocerlos bien para ir aceptando esos cambios. Los chicos hablan más de eso por el enaltecimiento que hay al miembro masculino, al pene. A las chicas nos cuesta todavía mucho comunicar ese deseo de descubrir nuestra propia anatomía, explorarnos es un tema todavía tabú, pero muy importante descubrir como cambia nuestro cuerpo a través primero de nosotras mismas. Así que nuestra primera relación sexual debería ser con nosotras mismas, tomarnos tiempo para estar solas, explorarnos mirarnos al espejo y reconocer esa nueva chica que esta en frente de nosotras. Hablarlo con las amigas y con quienes nos sintamos cómodas para hacerlo, normalmente mujeres más cercanas a nuestra edad y con las que empaticemos.

Emocionalmente este supone un revulsivo en nuestras vidas, aceptar estos cambios es difícil estamos más alteradas, susceptibles y realmente es que estamos manifestando lo que sentimos pero aún no sabemos como de asertivo debería ser esa comunicación. Para las familias es difícil, todo lo atribuyen a las hormonas a la edad, es cuando la paciencia debe ser infinita y la comunicación lo más cercana y fluida posible. Reconozcamos que a esa edad solo nos sentíamos empáticas con nuestras amigas, las únicas personas que pensamos que pueden comprendernos son las que pasan por lo mismo que nosotras en el mismo momento. Claro también hay brechas generacionales, seguro que lo que hacíamos mis amigas en mi momento de pubertad no es lo mismo que lo que hacen las chicas ahora, ni lo que piensan, es otro momento histórico, tecnológico…. El acceso a toda esta información está ahí pero no nos equivoquemos eso no quiere decir que no necesiten guías humanas que las orienten, porque imagínense que mucha de esa información rápida y atractiva es el cine porno especialmente entre los chicos. Así que sin alguien que esté cerca de ellas para estar atenta a lo que necesiten es muy peligroso, se crearán una imagen muy difícil de restaurar de su propia sexualidad.